Cuando Mao Zedong visitó a Stalin en la Unión Soviética el invierno de 1949, se instaló un baño especial que permitía recolectar su excremento, el cual era luego analizado en laboratorio para intentar obtener pistas sobre su estado de ánimo.

“Por ejemplo”, explicó el ex agente Igor Atamanenko, “si detectaban altos niveles del aminoácido triptófano concluían que la persona estaba calma y accesible. Pero falta de potasio en la caca era interpretada como un signo de disposición nerviosa y de alguien con insomnio”.

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Fuentes

Steven Rosenberg. "Stalin 'used secret laboratory to analyse Mao's excrement'". BBC, 28 de enero de 2016 http://www.bbc.com/news/world-asia-35427926