“No se preocupe, le hacemos alitas con hoces y martillos”

“No se preocupe, le hacemos alitas con hoces y martillos”

“No se preocupe, le hacemos alitas con hoces y martillos”

En 1958, Mao recibió a su homólogo soviético Nikita Jrushchov. Mao resolvió llevar negociaciones en una piscina, de manera de humillar a su contraparte. Él era un asiduo nadador, que había reportado supuestos récords de velocidad en tramos de más de 16 kilómetros en el río Yangtzé. Jrushchov, en cambio, no sabía nadar, y debía usar flotadores, en una escena que lo hacía lucir sumamente indigno.

En palabras de William Taubman, biógrafo de Jrushchov, Mao “observó los torpes esfuerzos de Jrushchov con obvio deleite y luego se zambulló en el fondo y nadó de un lado a otro con diferentes brazadas”. El médico personal del presidente creía que estaba desempeñando el papel de emperador, “tratando a Jrushchov como un bárbaro que vino a rendir homenaje”.

Las relaciones se deterioraron tras esta cumbre, un proceso que culminó con la histórica ruptura sino-soviética de 1961.

Comparte!

Vota!

1 Estrella2 Estrellas3 Estrellas4 Estrellas5 Estrellas6 Estrellas7 Estrellas8 Estrellas9 Estrellas10 Estrellas
(1 votos, promedio: 9.00)
Loading...

Fuentes

Mike Dash. "Khrushchev in Water Wings: On Mao, Humiliation and the Sino-Soviet Split". THE SMITHSONIAN MAGAZINE, 4 de mayo de 2012 https://www.smithsonianmag.com/history/khrushchev-in-water-wings-on-mao-humiliation-and-the-sino-soviet-split-80852370/

Agregar un comentario

Su dirección de correo no se hará público. Los campos requeridos están marcados *