“Cosa de mirarlo para advertir que no mataría una mosca”

“Cosa de mirarlo para advertir que no mataría una mosca”

“Cosa de mirarlo para advertir que no mataría una mosca”

Durante la dictadura de Pinochet, miles fueron detenidos sin siquiera antecedentes, solo por estar de visita en casa de un sospechoso, por andar sin documentación o, como relata Hernán Valdés, porque se bajaron de una micro detrás de una chica que resultó que trabajaba para la policía militar. En esa ocasión, los torturadores se dedicaron a pedirle a ese inocente que contara chistes. Solo le aplicaban electricidad si era malo.

En el invierno de 1973, el general Carlos Prats, convencido de la lealtad a toda prueba de su subalterno Augusto Pinochet, le encomendó elaborar planes de contingencia ante una eventual insurgencia antigubernamental.

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Fuentes

Pamela Constable, Arturo Valenzuela. “A Nation of Enemies”. Ed. W. W. Norton and Company. ISBN 0393309851. Pág. 50.

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