En 1960, los Beatles probaban suerte en Hamburgo, viviendo en una ínfima bodega sin ventanas que sostenía una pantalla donde se proyectaba cine porno. En noviembre deportaron a George Harrison, quien tenía solo 17 años -había abandonado el colegio a los 16- y había mentido a las autoridades alemanas acerca de su edad.

Una semana más tarde, los deportados fueron Paul McCartney y el entonces baterista Pete Best. ¿El motivo? Fueron acusados por el dueño del cine por intento de incendio. Habían prendido fuego a un condón en la pared.

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Los Beatles volvieron a Hamburgo cinco veces entre 1960 y 1962. Como narra el biógrafo Philip Norman “porque conseguían mucho alcohol y mucho sexo”. Tanto viajaban, contaba Lennon, que en sus intermedios en Liverpool solían tomarlos por alemanes y los felicitaban por su buen inglés.

Fuentes

Matthew Jefferies. "Hamburg: A Cultural & Literary History". Ed. Signal Books, 2011. ISBN: 9781904955757. Pág. 171